El evento del deporte mundial por excelencia con el que todos sueñan escribe a partir del 26 de julio las primeras líneas de la historia de su trigésima edición. Los Juegos Olímpicos (JJOO) 2024 se dan cita en París y la gran Phillipe Chatrier de Roland Garros espera ya a uno de sus mosqueteros, Carlos Alcaraz, que busca ascender al olimpo del tenis mundial y coronar una temporada histórica con una medalla colgada sobre su cuello (o quién sabe si dos).
El jugador de El Palmar tiene marcada en rojo esta fecha en la que se estrena en su primera aventura al mando del tenis español. Con los cinco aros de fondo y la bandera nacional en su pecho, Alcaraz parte como máximo favorito para tocar metal en las instalaciones donde se coronó en el segundo 'grande' de la temporada hace casi dos meses.
Así, el español llega por todo lo alto tras un Wimbledon inmaculado en el que se ha coronado como 'Carlos II de Inglaterra': el murciano fue de menos a más en el All England Tennis Club para colocar la guinda del pastel en la final. Un año más, la historia se repetía. El dominador del circuito en los últimos tiempos se enfrentaba a uno de los 'mandamás' del tenis de las últimas décadas, Novak Djokovic. En un encuentro con un guion totalmente inesperado, el de El Palmar se impuso por 6-2/6-2/7-6 sin dar ninguna opción al serbio y asestó así un golpe de gracia a un inevitable cambio de guardia en el tenis mundial.
Gran favorito en individuales
Bajo el lema 'Corazón, cabeza y c*jones' acuñado por su abuelo, el español figura en el cuadro individual de estos Juegos Olímpicos de París 2024 como el gran favorito para colgarse la medalla del metal más preciado y suceder a algunos como André Agassi, Rafael Nadal o Andy Murray (x2), entre otros.
Sin embargo, se presume que el camino estará lleno de algunas espinas con nombre y apellidos que también aspiran a conseguir una de las máximas gestas del deporte: el incombustible Novak Djokovic apura la que podría ser su última opción de colgarse un oro, mientras que Jannik Sinner o el propio Zverev también llegan en gran forma a la villa olímpica. No obstante, tal y como predica el dicho, cuánto más duro el camino, más dulce la victoria.
Una dupla para la historia
En una modalidad muy nueva para él, el murciano busca tocar la gloria junto a su ídolo y predecesor, Rafa Nadal, en lo que podría ser el último baile del máximo baluarte tenístico español, quien ya mordió el oro en Pekín 2008, en la categoría individual; y en Londres 2016 junto a su compañero y amigo Marc López (dobles).
Así, Carlos Alcaraz y Rafael Nadal aparecen ya en el cuadro de dobles como una dupla esculpida bajo el cincel de la historia del tenis español. De esta manera, el coraje de quien lleva el espíritu de lucha en sus venas se junta con la sangre fresca de quien apunta a ser el sucesor del tenis español para ser la rara avis que una de nuevo a toda una nación al unísono de la victoria.
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